En un conmovedor acto de fe y transformación, nueve privados de libertad del Centro Penal de Gracias, en el departamento de Lempira, decidieron iniciar una nueva vida al recibir el bautismo y declarar públicamente su fe en Jesucristo.
La ceremonia, realizada al inicio de la Semana Santa, estuvo dirigida por el misionero Víctor Almendarez y su equipo, quienes han dedicado su labor a llevar el mensaje del Evangelio a los lugares más necesitados. En un ambiente de profunda espiritualidad, los internos participaron de forma voluntaria tras semanas de enseñanza bíblica y acompañamiento espiritual.
El acto incluyó oraciones personalizadas por cada uno de los bautizados y la entrega de diplomas conmemorativos que simbolizan el inicio de su caminar en la fe cristiana. La ceremonia se llevó a cabo en una pila dentro del recinto penitenciario, adaptada especialmente para el momento.
«Para obedecer la Gran Comisión no hay excusas. Hoy hemos bautizado a nueve hombres dentro de una prisión, y juntos seguimos demostrando que la esperanza y el cambio verdadero pueden nacer incluso en los lugares más oscuros», expresó Almendarez en una publicación en sus redes sociales.
El misionero reafirmó su compromiso de continuar esta misión evangelizadora en otros centros penitenciarios del país, con la visión de transformar corazones a través del mensaje de salvación.
